Había muchas esperanzas en los aficionados del
Athletic Club en que su equipo olvidara las sensaciones agridulces de la
pretemporada y diera un vuelco a su imagen en el inicio liguero. Sin embargo,
el primer envite corroboró la idea de que a los de Ernesto Valverde les queda
aún recorrido para empezar a carburar.
El partido ante el Sporting de Gijón en El
Molinón, donde los rojiblancos no perdían desde hace 25 años, se antojaba
propicio para arrancar el campeonato doméstico con buen pie y dejar atrás las
dudas del periodo de preparación. Por este motivo, el equipo visitante era el
favorito en las casas de apuesta, como 888Sport.es, pero lo cierto es que
fueron los locales los que pusieron la mayoría de momentos buenos en el partido
y los vascos los que mostraron más carencias. Cosas que mejorar sobre todo en
defensa, donde se vieron lagunas y donde, de no ser por un penalti detenido por
Gorka Iraizoz y el larguero, el castigo podía haber sido mucho mayor que el 2-1
final.
Los goles de Cop y Víctor Rodríguez plasmaron
la superioridad de los asturianos, que solo se sintieron algo incómodos cuando
Iñaki Williams mandó el balón al fondo de la portería tras un disparo que tocó
en Amorebieta. Un gol que se le atribuiría al defensa ex rojiblanco. Fue
precisamente también en la parte atacante donde los bilbaínos reflejaron
síntomas de poca frescura, lentitud en los movimientos y falta de acierto.
Evidentemente, nada que sea excesivamente preocupante a estas alturas, pero en
lo cual conviene trabajar para mejorar de cara al encuentro de la semana que
viene y estar al máximo para la vuelta de la Liga tras el próximo parón de
selecciones.
Como nombres propios destacaron Williams y
Aduriz, aunque de forma distinta. El joven jugador del Athletic, que se vio
envuelto en una situación desagradable cuando se profirieron desde la grada
cánticos racistas, los cuales obligaron al colegiado, Clos Gómez, a parar el
encuentro, fue el mejor de los suyos. Con su vitalidad y su velocidad de
siempre generó los apuros que pudo en la zaga del Sporting. Por su parte, Aritz
Aduriz demostró que todavía no está en su mejor forma. Tuvo una ocasión clara
en la primera parte que no pudo culminar y después pasó desapercibido. Una
asignatura importante la del Athletic de recuperar a su mejor goleador los
últimos años.